Jacques Bonnier
Cruzado
Perla
Banderillas
Este precioso caballo, de capa tan especial, se decantó como uno de los equinos más seguidos por la afición en la cuadra de Pablo Hermoso de Mendoza. Con su rítmico tierra-tierra, de frente en cualquier distancia, galopando a dos pistas, quebrando con facilidad y todavía dándose el gusto de realizar ajustadas piruetas, todo ello con una transmisión fuera de lo común, basada en una proyección de inseguridad superada en los terrenos más comprometidos.